Eramos pocos y ...

Eramos pocos en el espacio y lentamente los vuelos de astronautas y cosmonautas fueron sucediéndose en 1961, en una incipiente carrera de las dos superpotencias. Tras el hito del primer vuelo de un ser humano a la órbita, realizado por la URSS con Yuri Gagarin, los estadounidenses respondieron lanzando las primeras misiones del Proyecto Mercury, cápsula monoplaza destinada a dar experiencia en vuelo a los astronautas del primer grupo de la NASA.

Mercury 3-Freedom 7
Tripulada por Alan B. Shepard, pudo convertirse en el primer ser humano en alcanzar el espacio. Sin embargo un vuelo de prueba adicional ordenado por Wherner von Braun, retrasó el despegue de la Freedom 7. En consecuencia, llegó el 12 de abril y los soviéticos pusieron en órbita a Yuri Gagarin. Finalmente el despegue se fijó para el dos de mayo de 1961. El vuelo iba a ser suborbital, el Mercury-Redstone sería lanzado en una órbita parabólica, alcanzaría un punto máximo de altitud y caería al Océano Atlántico, donde sería recuperado.

Réplica del Mercury-Redstone de Shepard y Grissom. Imagen NASA

Finalmente debido a las malas condiciones climatológicas, el vuelo despegó el 5 de mayo, sometiendo el misil Redstone a 6'3 Gs de sobrecarga a su tripulante. A diferencia de Gagarin, Shepard controló la actitud de su nave, probando sus propulsores y moviendo la capsula en sus tres ejes. Tras un vuelo de 15 minutos, astronauta y nave fueron recuperados, reparando el orgullo americano, que se hallaba un poco maltrecho tras el Sputnik y el Vostok-1.

Shepard a bordo del buque de recuperación. Detrás su cápsula Mercury. Imagen NASA

Mercury 4-Liberty Bell 7
El 21 de julio de 1961, Virgil "Gus" Grissom despego de Cabo Cañaveral para efectuar una repetición del vuelo de Shepard, con la ventaja añadida de la experiencia adquirida por este en su pionero vuelo.

Grissom habla con su suplente Glenn antes del lanzamiento. Tras ellos un técnico prepara la cápsula Mercury. Imagen NASA

El vuelo transcurrió sin novedad, así como la reentrada. Una vez la cápsula sobre el océano, Grissom hizo todas las operaciones post-vuelo programadas antes del rescate, y tras esto llamó a los helicópteros para que fueran por él. De repente la escotilla, que tenía unos pernos explosivos para desprenderla en caso de emergencia, saltó por los aires, lo que hizo que la nave se inundara. Grissom salió de la nave y se puso a nadar. Los helicópteros se acercaron a recoger la Mercury que debido a la entrada de agua superaba el peso que podían levantar; mientras Grissom se había dado cuenta que había olvidado cerrar una entrada de aire de su traje, y por ahí estaba entrando agua, haciendo que su traje se convirtiera en un ancla que tiraba de él y estaba a punto de ahogarle.

Un segundo helicóptero se dió cuenta y lanzó un collarín de rescate para Gus. Mientras el otro helicóptero soltaba la cápsula ante el temor de que su peso les arrastrara a todos al agua. La Mercury se hundió en una zona donde la profundidad llegaba hasta los 5,1 kilometros.

El helicóptero de rescate intenta sacar de entre las olas una semihundida cápsula. Debido al peso añadido del agua, hubo de ser abandonada, hundiéndose en el océano. Imagen NASA

Vostok-2
Ajenos a los pequeños saltos espaciales de los americanos, los soviéticos quieren seguir manifestando su supremacía en el espacio. Así el 6 de agosto de 1961, lanzan a Gherman S. Titov al espacio desde la misma plataforma de la que despegó Gagarin, pero no en una repetición del vuelo, sino en una misión mucho más ambiciosa: Titov iba a dar 17 órbitas a la tierra, completando un vuelo de 24 horas.

Titov en el bus que le lleva a la plataforma. Captura del vídeo del vuelo Vostok-2 del canal SciNews

La llegada a la órbita transcurrió sin incidentes, pero el vuelo de 24 horas comportaba todas las actividades a realizar en un día normal. Se introdujeron experimentos y se permitió el control manual por parte del cosmonauta. También iba equipada con un equipo de filmación y Titov grabó diez minutos mostrando su nave e imágenes desde el espacio. El cosmonauta comió, durmió y también sufrió por primera vez el Sindrome de Adaptación al Espacio (SAS). Cabe recordar que en los tres vuelos anteriores la estancia más larga fue de 108 minutos. Si bien no incapacitante, el cosmonauta manifestó el malestar y enseguida se empezó a pensar en una barrera física que a lo mejor no permitía estancias largas en el espacio.

Pasadas las 17 órbitas, se inició la reentrada, pero el módulo de equipos falló en la separación, haciendo que quedara sujeto por varias conexiones, que debido a las tensiones y calor de la reentrada, acabaron por soltarse, permitiendo la reentrada limpia de la esfera "Charik" con el cosmonauta.

Ilustración de la Vostok con el cosmonauta. El módulo de equipos inferior falló en la separación de la cápsula "Charik". Imagen tomada de la web Spacefacts

Como hiciera Yuri Gagarin -aunque los soviéticos no lo reconocieron-, Titov eyecto de la nave con su asiento, y aterrizó mediante paracaidas en la estepa kazaja. El cosmonauta con sólo 26 años en el momento del vuelo, sigue ostentando el record de persona más joven en haber volado al espacio.
Los soviéticos iban todavía muy por delante de los americanos en vuelos tripulados.

Vídeo del vuelo Vostok-2 del canal SciNews